sábado, 5 de noviembre de 2011
La tortuga y la liebre
Había una vez una liebre y una tortuga que se llevaban muy mal. Un día, la liebre le dijo a la tortuga que si hacía una carrera con ella y la tortuga aceptó. Empezó la carrera y la liebre salió corriendo mientras la tortuga iba muy lenta, pero lentaaaaaaaaa. La liebre le llevaba mucha ventaja a la tortuga así que dijo: - Voy a echarme una siesta porque hasta que me alcance la tortuga...Y la liebre se confió. Cuando se despertó, vio que la tortuga ya estaba en la meta. Al final la tortuga ganó. Pero si la liebre no se hubiera dormido, hubiera ganado.
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