Geronimo Stilton. ¡Qué vacaciones tan superratónicas!

Una mañana, cuando Geronimo se levantó, hacía muchísima calor, así que decidió  ir a la nevera a por un helado de queso fresquito.

En el autobús para ir al trabajo se encontró con Pinki Pink (su anterior secretaria).

En cuanto Pinki lo vio empezó: -Jefe, jefe. Y empezó a cantar: -Esta canción pone de los nervios hasta a un melón... Toda la gente estaba empezando a dar quejas. Geronimo no veía la hora de irse de vaciones.

Estando trabajando, Geronimo tenía mucha calor y bajó al sótano a buscar un ventilador. No veía la hora de irse de vacaciones.

Geronimo decidió que se iba de vacaciones y llamó a la agencia para hacer un viaje. Le propusieron un viaje a un hotel de lujo y él aceptó, pero por una urgencia del trabajo (de la impresora) perdió el avión. Volvió a llamar a la agencia y le propusieron un viaje a Egipto como si fuera un explorador, pero por una urgencia volvió a perderlo.

Al final sólo le quedaba un viaje a una ciudad apestosa, a un hotel de medio quesito y, por si fuera poco, iba Pinki Pink.. pero después de todo no fue tan mal.

Leéroslo